
El laboratorio de Gestión de Producto en Proceso (GPP®) se engloba dentro del Servicio Postventa de la filial española de FUCHS, en el que se analizan muestras de productos en servicio. Este análisis es importante para la prevención de fallos potenciales, el mantenimiento de la vida del fluido y la detección de anomalías en el fluido y en los equipos asociados.
Entre los productos que se analizan se incluyen los destinados a la mecanización, ya sean aceites o fluidos solubles en agua.
Índice de acidez: determina el grado de deterioro u oxidación del producto en proceso.
Viscosidad: es uno de los parámetros clave que permite identificar posibles contaminaciones con otros aceites de diferente viscosidad.
Sólidos: filtrar la muestra a un determinado tamaño permite evaluar la cantidad de partículas presentes en la muestra y evaluar si los sistemas de filtración funcionan correctamente.
FLUIDO SOLUBLE EN AGUA: ECOCOOL
Este tipo de productos requieren un seguimiento especial en su control y seguimiento en proceso, ya que, además de trabajar diluidos, hay que tener en cuenta las propiedades del agua de aporte y la posibilidad de que exista crecimiento microbiológico en este tipo de fluidos.
Aspecto y estabilidad: ensayo que facilita una observación rápida del aspecto de la muestra y su evolución en el tiempo. Ésta se introduce en una probeta de vidrio, previa homogenización, y permite detectar la presencia de aceites extraños y comprobar la estabilidad de laemulsión.
pH: es un parámetro de especial relevancia, ya que permite obtener información sobre la robustez del fluido. Un pH por debajo del límite establecido indica presencia de microorganismos o de contaminantes ácidos.
Kit de bacterias y hongos/levaduras: la presencia de agua favorece el crecimiento de microorganismos. Deben identificarse cuantitativamente si se trata de bacterias, hongos o levaduras, ya que el tratamiento correctivo es diferente según sea el caso.
Corrosión (IP-287): determina, mediante ensayo normalizado IP-287, el grado de corrosión que presenta la muestra. Las causas de la corrosión pueden ser varias: elevada presencia de bacterias, disminución del pH, nivel de cloruros elevados o concentraciones bajas.
Conductividad, cloruros y dureza: estos parámetros hacen referencia a la calidad del agua utilizada para realizar las emulsiones, ya que afecta directamente a la estabilidad de la emulsión y a la corrosión.
Concentración: el mantenimiento de la concentración en el rango recomendado es de vital importancia para el buen funcionamiento del fluido de mecanizado.
Existen básicamente 3 métodos para determinar la concentración.
- Titración de la alcalinidad.
- Rotura ácida, aplicable a productos que tengan parte de aceite en su composición y formen una emulsión.
- El método de refractometría, que permite obtener un valor de la concentración de forma rápida y sencilla.
Otros análisis
El laboratorio de GPP® también analiza otros parámetros que permiten conocer las propiedades del aceite en proceso y que se realizan según la aplicación y la naturaleza del producto:
Filtración de partículas sólidas a un determinado micraje.
- Espectros infrarrojos.
- Ensayos de lubricación.
- Espuma.
- Detergencia (tensión superficial).
Una vez analizados todos los parámetros, el laboratorio de GPP® realiza un informe que se entrega al cliente, en el que se recomiendan acciones a realizar o se informa de que la muestra presenta unas propiedades correctas.
Paralelamente a estos informes, la filial española de FUCHS también mantiene un histórico de todas las muestras analizadas para observar tendencias a lo largo del tiempo y dar mejor servicio a nuestros clientes.